she had only one more dance

domingo, 31 de octubre de 2010

y si no estas, tampoco estoy.
nada queda, sin tu amor.
sola lo menea para toda la tribuna.
contra ella hay que inventar una vacuna.
es un bajon.
vos ya sabes, que no te escucha no le importa y no te da lo que queres.
la musica que cuando llega, me llena con su sentimiento.
i close my eyes.


bajo una mano del cielo, y acariciando su pelo. ~
lindo sería no? que un día venga alguien invisible. alguien que nunca hayamos conocido, ni nos haga falta conocer, y nos hable de su vida, y nos pregunte de la nuestra. alguien quien extrañamente se interese por lo que te pasa. alguien que no siempre piensa en el yo perfecto. en el yo, yo, yo. asi, yo no creo que esto vaya a pasar. pero. ojalá un día pase. de verdad pasé.

sábado, 30 de octubre de 2010

se despide con tanto amor ~
personalmente, no creo en el amor para toda la vida, eso es más costumbre que amor. alguien que pasa cincuenta años con una persona no lo ama, lo necesita para que su rutina cumpla con lo que tiene que hacer.
familia ramirez. la mujer se despierta alas 7.00 am, hace un té para su marido, y un café con leche para ella. despierta a sus hijos, María Ana Ramirez Baldós, y Juan Lucas Ramirez Baldós, les hace un nesquick calentito, les prepara la ropa y la mochila, despide a su marido con un beso y le dice suerte amor! y se va con su audi a llevar a los chicos al colegio que esta pegado al country, privado.
Ella, una empresaria muy conocida, después de llevar a los chicos al colegio, se dirige a su trabajo, en su despacho, se encuentra el asistente, prendiéndole la apple, y organizando su día en su blackberry. llego a las ocho al trabajo. a las cinco y media los chicos salen del colegio bilingue y se dirigen a natacion, su asistente los lleva y los trae. su mamá vuelve a las diez y media de la noche. la mucama ya dió de comer a sus hijos, y su mamá no les dió las buenas noches. su padre llega a las once del trabajo de abogado federal que tiene. ambos trabajos muy bien pagos, y en una genial actividad económica, comen juntos y deciden irse a dormir, para que al día siguiente, todo corra el mismo camino que corrio el dia anterior, y el anterior, y el anterior... así hasta que sus hijos deciden irse a estudiar de abogados, contadores, doctores a una facultad privada en un barrio privado en londres, USA, o buenos aires.. y cada hijo continúa la GRAN vida de sus padres. QUÉ ironía!
piensa el mundo esta en la calle ~
el pibito que nunca salió de su casa, ese pibito que siempre estuvo con la mamita, el pibito, el pibe bien, ese pibe no caza una, porque vive con la mamita. El tipo de 30, el frustrado ese, que sigue viviendo con su mamá, se le va la vida con el viento. la vida, se vive. se vive, en la calle, porque en la calle, VOS. en la calle. solo. asi solo ahí, recien ahí, vas a aprender. en el colegio privado, en el colegio privado que te enseñan a moverte por una parte de la vida, en el country, encerrado, en tu casita, en el centro, con mucama, con tu mama, con tu papa. EN LA VILLA SE APRENDE MÁS- ayudando, viendo otras realidades se aprende. la tipica boluda que se cree que si tenés más plata sos mejor, esa es una ignorante de mierda, esa persona nunca vivió. el que alguna vez ayudó. ese vive, vive viviendo. el que vive la realidad. el que sabe que hay un nene muriendose de desnutricion, de anorexia, o de cancer, o sida, ese, mientras se compra una louis vuitton, ese es el pibe que vivio con el sueldo del otro, OJALá todo el mundo pueda aprender LO lindo que es ayudar, que es vivir con un nene pobre, lo lindo que es que el pibe pobre sea un desagradecido, y aprender a escuchar PORQUÉ es así sin juzgarlo de pendejo de mierda.
Mira, la gente como vos, como yo, los que la tenemos bien puesta. Si, bueno, pasa que me lastiman igual. Y bueno, dale pelea. Dale, a mi me sacaron tantas cosas y sin embargo seguí adelante. Las cosas que de verdad valen la pena son así, se graban a fuego. Y las heridas duelen, pero más duele lo que esta bajo la piel. Un moretón duele, pero se va. El dolor del alma nunca se va, y ese dolor esta ahí, bajo la piel. Así que vos ya sabes, dale pelea
Comedia romántica... Vamos a empezar hablando de las características básicas del género. Una regla de oro de una buena comedia romántica es que los personajes protagónicos tienen que ser personajes opuestos, antagónicos, bien diferentes. Esto nos sirve y nos asegura que el día que estos personajes se conozcan se va a llevar horriblemente mal y esto es fundamental. A lo largo de la historia estos personajes van a vivir situaciones de encuentro y situaciones de desencuentro, básicamente situaciones de desencuentro. Todo va a parecer que el amor entre estos personajes es prácticamente imposible y para lograr esto se utilizan recursos clásicos como por ejemplo crear situaciones de equívocos, situaciones de confusiones, malos entendidos. Como contrapartida aparece un segundo elemento fundamental: el factor mágico. En determinado momento van a aparecer situaciones mágicas que van a indicar que el amor de estos personajes deberá llegar a un encuentro. Y acá aparece el tercer elemento que es el amor. Hay amores picantes, hay amores suaves, hay amores que mejor ni probarlos, hay amores de mundos opuestos como el amor del rico y la pobre...clásico. Amores que parecen imposibles, amores inalcanzables. Pero hay que saber que cuando digo "no" en realidad estoy diciendo "no por ahora". Y cuando digo no por ahora estoy diciendo "si". Es solo cuestión de tiempo ¿si? La enamorada que espera y espera y espera y lo único que hace en su vida es esperar pobre. Después están los amores secretos, como por ejemplo el de Clark Kent y Luisa Lane. Encima el siente que es un amor no correspondido, y bueno..Amores. Pero todos estos tipos de amores tienen un factor en común que es la valentía. Y ahí radica la esencia de la comedia romántica. El valor que tienen sus protagonistas de enfrentar las adversidades sin miedo, solo por amor. Y para concluir el amor entre estos personajes debe concretarse solamente al final de la historia. Ustedes podrán pensar o me dirán bueno la comedia romántica es un poco fantasiosa, pero díganme si no es así como uno vive la vida cuando esta enamorado... eso es lo que yo creo.
La vida es curiosa, durante años uno se pregunta cual es el sentido de este baile, para que luchar, porque la vida es una eterna pelea. Si la vida es curiosa y vueltera, de giros absurdos, inexplicables. La vida tiene esas casualidades tan sospechosas. Tanto que nos hacen pensar que todo tiene un para qué. Si, un sentido. La vida cambia todo el tiempo. No nos deja acostumbrarnos a un golpe que enseguida viene otro atrás. Y uno se sorprende siempre y así sigue preguntándose por el sentido de todo. Preguntándose el sentido de estar presente en el momento y el lugar equivocados. El sentido de ser buenos y malos. Habrá premios y castigos para unos y otros? Uno pasa por la vida haciéndose esas preguntas y muchas otras más pero en el fondo todo se resume en una sola: cual es el sentido de la vida? Qué irónico, recién ahora empiezo a entender el sentido de la vida.
Y es así, uno pasa la vida preguntándose por el sentido de la vida. Esperando ese algo que falta y que nos hará felices. Y tal vez la respuesta, sea que la vida no tiene sentido. Que la vida simplemente se vive. Y simplemente viviendo, podamos decir al final, que nuestra vida VALIO LA PENA.
Somos ese aliado que los sostiene, que los mantiene en equilibrio sin que nunca jamás se den cuenta. A veces es duro que nadie nos vea ni nos registre y uno se siente que no es parte de eso. A veces no saben que nosotros estamos acá cuidándolos en silencio, pero alertas. Porque en definitiva eso es un amigo invisible, alguien que te cuida sin que lo notes. Un amigo invisible no anuncia su llegada, simplemente llega, y tal vez uno no lo registre, pero una vez que entro. No se va nunca más. Y si, es raro, misterioso, te atrapa, pero da miedo. En el camino se van a sentir solos, van a tambalear pero van a encontrar la forma de hacer pie, de apoyarse en alguien. ¿Eso somos? Eso somos y seremos siempre. El amigo invisible, el aliado, como quieras llamarlo. El que ayuda.

miércoles, 27 de octubre de 2010

tiempo atrás, lo salpicabas todo con tu encanto, te he visto reducir hombres a llanto y a la fortuna despreciar, hoy rayas el mediodía casi descocida, sos un flamenco con el ala herida, con la interperie te arropas, como yegua derrochaba su esplendor, eramos salvajes sin frenos para el amor.
de noche las estrellas me acompañara, seras como una luz que alumbra mi camino, al partir un beso y una flor, un te quiero una caricia y un adios, es ligero equipaje para tan largo viaje, las penas pesan en el corazon, donde el sol cada mañana brilla el mar forjaran en mi destino las piedras del camino.

lunes, 25 de octubre de 2010

- ¿Como se olvida? no recordando,
¿como se recuerda? a partir de los sentidos.
¿Que quiere decir esto? una imagen, o un sonido, o un aroma digamos, te despiertan un recuerdo
¿Lo que tenemos que hacer? Tenemos que anular los sentidos.
- Esta totalmente loco, aunque a mi me deje ciega, sorda y muda yo igual me voy a seguir acordando de todo.
Te voy a tomar yo un examen a vos: por ejemplo, pensa en un elefante rosa…ahora olvídate del elefante.
Ahora responde mi pregunta: de que te dije yo que te olvidaras? Ves, es imposible olvidarse de lo que uno sabe que ya se olvidó
La memoria no está en la cabeza,
¿usted no se puede olvidar de un simple elefante rosa que le nombré y quiere que yo me olvide de toda una vida de recuerdos?
Millones de recuerdos inolvidables son lo que nos hacen ser lo que somos.
La memoria se podrá dormir, pero nunca se muere, está en el corazón.
Las vivencias, las frustraciones, los sueños, todo revuelto y listo para salir en la primera de cambio, ¿sabes qué? yo podré quedarme acá por toda la eternidad, pero los recuerdos son míos
Hubo una vez una joven muy bella que no tenía padres, la criaba su madrastra, que tenia dos hijas.
La hijastra era quien hacia los trabajos más duros de la casa y como sus vestidos estaban siempre manchados de cenizas, la llamaban Cenicienta.
Y mientras Cenicienta fregaba y fregaba, su cruel madrastra y sus malvadas hermanastras, iban a la fiesta del príncipe.
Cenicienta lloro y lloro, sabiendo que su sueño de ser una princesa, nunca se concretaría; lo que no sabía, era que se equivocaba.
Y así fue que con la ayuda de su hada madrina, Cenicienta partió feliz hacia la fiesta.
En el palacio las doncellas se peleaban por bailar con el príncipe, hasta que de pronto, el príncipe y todos los invitados quedaron maravillados por la belleza de Cenicienta.
Así fue como Cenicienta, a pesar de sufrir tantas humillaciones, de no entender porque sus hermanastras se habían ensañado así con ella y a pesar de sentirse muchas veces sola, Cenicienta siempre podía contar con la ayuda de su hada madrina, porque las hadas madrinas siempre ayudan a la gente de buen corazón, y Cenicienta lo era.
Por eso pudo perdonar a sus hermanastras, y en lugar de odiarlas, les enseño el camino a la felicidad.
Un camino al que únicamente se llega si nunca pero nunca abandonamos nuestros sueños
QUÉ PRETENDE USTED DE MI?

Una de las cosas más difíciles de las relaciones es saber exactamente que quiere el otro de vos o con vos.
Cuando alguien te trata mal te preguntas por qué ¿Qué quiere de mí?
O cuando alguien te trata muy bien ya desconfías ¿Qué quiere en realidad?
Cuando la limosna es grande hasta el santo desconfía ¿De que desconfía el santo? De las intenciones del que da las limosnas.
Nunca se puede estar seguro de que es lo que quiere el otro y esa incertidumbre genera una especie de angustia.
Y como esa duda nos genera angustia empezamos nosotros a dar respuestas y tratar de adivinar que quiere el otro en realidad.
Asumimos y presumimos, damos una respuesta rápida y avanzamos, tal vez nos equivocamos pero ya no tenemos la angustia de no saber que quieren de nosotros.
Angustia mucho no saber que quiere el otro de vos, te inquieta, te perturba.
Por eso nos volvemos desconfiados, nos ponemos a la defensiva, asumimos siempre que las intenciones del otro no son buenas.
Nunca podemos saber que quiere el otro o por qué nos quiere, eso es un eterno misterio ¿Por qué siempre caemos en la trampa de dar respuestas apresuradas?
El bello siente que lo quieren solo por su belleza, el rico por su riqueza, el poderoso por su poder ¿Por qué pensamos tan mal del otro?
El otro, sus intenciones siempre son una amenaza para nosotros ¿Por qué?
Pero si dejáramos de adivinar y le diéramos la chance al otro de demostrarnos que siente, que quiere y por qué nos quiere tal vez nos sorprenderíamos.
Si soportáramos esa angustia de no saber que quieren de nosotros tal vez algo nuevo podría llegar a nuestra vida.
Si pudiéramos dejarnos atravesar por el deseo del otro, dejar que quieran algo, que nos quieran, dejar que pretendan cosas de nosotros porque eso es existir.
El deseo del otro nos atemoriza, sentimos que quiere arrebatarnos algo muy preciado. ¿Pero no es eso en definitiva lo que anhelamos? Que nos quieran por lo que somos, por lo que tenemos, por eso que nos hace únicos.
¿Qué quiere el otro de mí? No sé, me quiere por las razones que sea, me quiere. ¿Tanto cuesta hacerse cargo de eso?
Tocar tu corazón. Tal vez eso es lo que quiere el otro cuando quiere algo de vos.
Los días van pasando vos ni te das cuenta y de pronto, primavera. La vida va cambiando silenciosamente, pero un día abrís los ojos y ves que todo cambió.
Pero no solo la vida cambia sino que también cambia nuestra manera de ver la vida. Un día te das cuenta que lo que ayer veías de una manera hoy lo ves de otra. Cosas que antes ni veías de pronto las empezas a ver en todos lados. Es como un despertar. Y cuando eso se despierta todo cambió, no se puede frenar, como la primavera.
Y cuando cambió la vida y tu manera de ver la vida ya nada se puede hacer. Es tiempo de cambios.

Hay cambios que llevan tiempo, pero a veces es tiempo de cambiar. A veces hay que ponerse los pantalones largos, tomar la iniciativa y hacer el cambio.
Saber a qué cambios o cuando es tiempo de cambiar es algo muy difícil, pero tal vez de eso se trate ser adulto.
Hay una gran diferencia en darle tiempo a algo y dejar pasar el tiempo. Darle tiempo a algo es dejarlo madurar, es tener la valentía de saber esperar. Dejar pasar el tiempo es tener la cobardía de no hacer lo que queres hacer cuando lo queres hacer.
Que el tiempo pase y el cuerpo te cambie es natural, no dejar pasar el tiempo y cambiar eso es madurar.
Madurar es tal vez aceptar los cambios que vienen con el tiempo y saber cuándo es tiempo de cambiar. Por eso es tan difícil ser adulto, porque no es una cuestión de edad, podes tener 15 y ser muy maduro o tener 50 y ser infantil.
Yo era una nena que se negaba a aceptar que había cambiado, hoy quiero ser una mujer que sabe cuándo es tiempo de cambiar.
Tal vez hoy deje de ser una nena y aprenda a aceptar los cambios que trae el tiempo y aprenda a distinguir cuando es tiempo de cambiar.
A veces siento algo que no puedo reconocer ni ante mí misma. A veces veo el amor que se tienen algunas personas y siento algo muy raro en el estómago. Es una mezcla de tristeza y de bronca. Algo horrible nace en mí, como si no soportara ver la felicidad ajena.
Es como una angustia. Una nostalgia por algo que tuve y ya no tengo, pero no sé qué es.
Cada vez que veo que alguien tiene eso que yo no tengo se me enciende un fuego, algo espantoso que odio sentir. Me niego a reconocerlo pero creo que ese fuego que siento es envidia.
Un envidioso envidia algo que puede conseguir, pero un resentido sabe que jamás va a conseguir eso que envidia.´
Sentir que no pudimos ni podemos lograr eso que queremos genera vergüenza y dolor, un dolor que te va matando.
Sentir envidia es creer que uno tiene un derecho, que la vida nos debe algo y que es injusto que se nos niegue. Pero la vida no nos debe nada, tenemos lo que queremos y lo que podemos. Y por todo lo que nos falta hay que luchar. Ahí la envidia se convierte en deseo, y el deseo en motor.

¿Por qué nos sometemos incluso en situaciones en las que podríamos rebelarnos?
¿Por qué incluso cuando por una cuestión numérica estamos en condiciones de rebelarnos no lo hacemos?
Hay dos motores que mueven a la humanidad, uno es el deseo y el otro la envidia, o sea desear lo que sea el otro. Todos tenemos deseos, son el motor de nuestra vida. No es malo tener deseos, pero cuando no alcanzamos lo que deseamos y lo alcanza otro ahí nace la envidia.
Nadie desea lo que nadie desea. Un cuarto lleno de juguetes, dos niños, uno agarra un juguete y el otro por supuesto quiere el mismo juguete. Está en la naturaleza.
‘Que suerte, que guacho, que orto.. ' Si, guacho, cosas que le decimos al otro cuando creemos que tuvo suerte, pequeñas expresiones simpáticas teñidas con una gotita de envidia, nada grave. ‘Envidio el vestido que tiene mi amiga, pero bueno, yo voy a tener otro también’. Hay otra envidia que es mucho más peligrosa: la envida del ser.
La envidia del ser es algo tan profundo, tan profundo que a veces no lo podemos ver. Ya no envidio lo que tiene el otro, envidio lo que es el otro.
Los fuegos de la envidia tienen poderes casi sobrenaturales. Son fuegos que pueden arrasar con todo, pero que pueden encender un motor.
Un recordatorio de que algo no estamos haciendo para cumplir nuestro propio deseo. Hay que luchar por nuestro deseo, no darse por vencido nunca. No existe fuerza más poderosa que el deseo, es indestructible. Nuestro deseo es el único capaz de apagar el fuego de la envidia.
Para describir un estado de ánimo podes usar adjetivos: Triste, apenado, desolado, afligido.
Pero a veces los adjetivos no alcanzan para describir, entonces usamos metáforas: Partido al medio, quebrado, muerto en vida.
Las metáforas van más allá de los adjetivos, le dan un nuevo sentido a las palabras.
Una metáfora es algo que se dice, mucho más que el sentido literal de las palabras.
La metáfora tiene el poder de las imágenes, de eso que atraviesa la razón y llega directo al corazón.

El poder de la metáfora no es lo que quiere decir, sino lo que dice.
Cuando queremos decir algo usamos palabras, pero cuando queremos demostrar algo usamos metáforas.
Porque una metáfora no quiere decir, una metáfora dice.
‘Ojos de cielo’ quiere decir que sus ojos son celestes como el cielo.
En una metáfora una palabra le transfiere su sentido a la otra, son imágenes que se transfieren para abrir una nueva dimensión.

El resultado es positivo.
Eso sí que es una metáfora.
Todo cambia. Como decía Heráclito “no podemos bañarnos dos veces en el mismo río”. Cuando volvemos al río a bañarnos por segunda vez sus aguas ya son otras, están renovadas, se han transformado, ya no es el mismo río. El cambio es perpetuo.
Nadie puede resistirse al cambio
. Resistirse al cambio es como resistirse al paso del tiempo, una batalla perdida de antemano.
Siempre estamos cambiando, mutando silenciosamente, aunque no lo escuchemos. Cambiar es inevitable. El cambio es la esencia de las cosas, de nosotros, del universo ¿o será al revés? Que la esencia es la que permanece inalterable.
¿Dónde está nuestra esencia, nuestro ser? ¿En eso que permanece a pesar del cambio o en el cambio permanente? ¿Dónde estamos?
¿Podemos ser los mismos si todo cambia, o somos los mismos a pesar de cualquier cambio?
¿Cuánto de utopía tiene pretender cambiar todo de una vez?
El cambio tiene sus tiempos, sus procesos. El cambio es algo orgánico porque está vivo.
Tal vez la clave sea cambiar con el cambio. Resistirse al cambio es como querer congelar el agua del río para bañarse siempre en las mismas aguas.
Cambio es revolución, y ninguna revolución puede ser amable, confortable, cómoda.
Si no cambias con el cambio un día abrís los ojos y ves que todo cambió, y ahí estás perdido en lo desconocido.
El cambio es una cuestión de tiempo. De tanto mover el árbol al final la fruta siempre cae. Y cuando el cambio llega no deja lugar a dudas. Cambia todo, arrasa, transforma, muta.
El cambio es la esperanza en la desesperanza. Es confiar en que eso, como todo, también cambiará.

domingo, 24 de octubre de 2010

vacío-

Siento como una gran nube negra que me cubre. Siento que no siento nada. Veo la vida que se mueve frente a mis ojos. Oigo ruidos, voces, siento olores. Pero es como si hubiera un muro entre el mundo y yo.
Sentirte vacío no es no sentir nada. Es sentir eso, sentir el vacío. Sentir ese agujero en el pecho que te absorbe, como una aspiradora, es como una profunda tristeza en un mundo feliz, es frio en un verano ardiente.
El vacío es llorar mientras todos ríen. Es llorar pero sin saber por qué. Es no esperar nada, es saber que no podes buscar, es estar solo en compañía, es peor que no tener respuestas, es no tener preguntas. No hay sentido, no hay nada, solo hay todo lo que falta.
Sentirte vacío es tener la certeza de que no habrá nada que lo llene.
Mi arma todavía está caliente y sin embargo no hay gritos, no hay lágrimas, no hay muerte, no hay nada. Mi arma y mi alma quedaron vacías.
Mi mente se va vaciando, llenando de nada. El vacío es oscuro y frio. El vacío está hecho de todo eso que no sos vos. Es dormir sin soñar. Es vivir sin soñar. Es amar sin sentir. Es soñar sin sentir.
¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? ¿Por qué siento este frio, mas frio del que nunca sentí en toda la vida?
Y desde ahí, desde el vacío más profundo, mi alma se empieza a llenar. Como un pulmón que se llena de aire mi mente se llena de imágenes, de sensaciones. Recién ahora comprendo que estaba vaciado.
Mi alma es mía otra vez.
Afuera ves claramente la solución. De afuera se ve tan fácil, vos decís “él, por más que esté con otra, ama a su chica. Y ella, por más que lo niegue, también lo ama”. Y decís “déjense de dar vueltas y estén juntos”.
Out los terceros en discordia. En una buena comedia romántica se soluciona todo, y todos quedan felices y contentos.
Y después de todos los enredos al final los secretos se revelan. El que tiene que hablar, habla, el que se tiene que enterar, se entera. Todo se soluciona y final feliz.
Pero en la vida siempre algo enrula el rulo. La solución que está ahí, al alcance de la mano, siempre parece escaparse.
Si uno viera de afuera la vida diría “no, no, no hagas eso boludo.¿no te das cuenta que la solución estaba ahí?”.
No boluda, no hagas como que no hay tal crisis, no niegues más.
“Pedazo de boludo” dice uno viendo como él se pierde cada vez más.
“No boludos” dice uno, tenían la solución en las manos, pero el rulo siempre vuelve.
Boludos, eso es lo que somos todos, unos boludos que enrulamos el rulo cuando la solución es tan sencilla.
Somos unos boludos que confundimos gordura con hinchazón, problema con solución.
El problema de la solución es confundir problema con solución. Es como creer que la tintura es el problema y la cana la solución.
Una dieta mágica te hace engordar el doble, un bronceador instantáneo te mancha la cara, una solución rápida te trae otro problema. Otras veces dejamos estar los problemas, confiando que se van a solucionar solos. Es como… como dejarte crecer el bofe y esperar que se vaya solo.
Somos boludos por naturaleza. Muchas veces cuanto más queremos solucionar algo más lo complicamos. Pero a veces la solución llega sola, en el momento menos pensado.
Buscamos soluciones, siempre, hojas de ruta, señales que nos indiquen por dónde ir, hacia donde ir.
Solución es sinónimo de remedio, resolución, conclusión, resultado, desenlace, fin, termino, reparación, arreglo, recurso, final, salida, salvación, alivio, encontrarle la vuelta al rulo. Esa es la solución.
Tan simple, tan complejo y tan hermoso como esto. Encontrarnos fue, es y será la solución.
Hay vivencias que aunque parezcan insignificantes nos marcan a fuego. Sensaciones que queremos repetir sea como sea, cosas que nadie más que vos puede entender.
Lo que nos define como personas es el modo que tenemos de sentir. Lo que nos define como mujeres es cuanto nos animamos a sentir.
¿Podes estar vivo si perdiste tu capacidad de sentir? Dejas de sentir y vas separándote de lo que alguna vez fuiste. Vas dejando de ser vos hasta olvidarte de quien sos.
¿Cómo haces para mirar adelante cuando tu vida quedó atrás?
Me duele su amor, su recuerdo, me duele acordarme de su cara, me duele no acordarme, me duele pensar que estará haciendo momento a momento.
Ayer éramos un equipo, nos completábamos, sin el estaba vacía. Hoy tengo que arrancármelo de la piel, odiarla hasta olvidarlo. Antes no sabía dónde estaba, ahora no sé dónde quedó, donde quedó..
Tendré que enojarme, enojarme con cada recuerdo, con cada vivencia. Tendré que enojarme con cada cosa que me recuerde, enojarme hasta odiarla, y odiarla hasta olvidarme de ella.
No entiendo la gente que dice que todo tiempo pasado fue mejor. Para mí lo mejor de mi pasado es que por suerte ya pasó.
El pasado es como un alimento que dejaste olvidado en la heladera, se pone rancio, se pudre, hay que tirar el pasado y vivir el hoy.
Si estás siempre mirando el pasado es porque te quedó algo pendiente, un botón sin cocer, una puntada sin dar… y yo tengo los botones bien cocidos y las lentejuelas bien pegadas, por eso miro solo para adelante.
El pasado es como un vestido que nos podemos sacar y no usar nunca más.
Dicen que nadie escapa a su pasado. Yo digo que no escapa el que no quiere escapar. Yo no le escapo al pasado, le huyo, yo vivo el presente.
La misma palabra te lo dice, "pasado", es algo que ya pasó, que ya fue. Por eso lo mejor es dejar atrás el pasado.
No entiendo la gente que se emperra con remover su pasado ¿Qué es lo que buscan? ¿Qué esperan encontrar? El pasado te amarga, te da insomnio, te vuelve obsesivo.
Hay que soltar el pasado de una buena vez, no sirve para nada.
Todos tienen la necesidad de resolver algo del pasado, como si se ganara algo con eso. Por favor, hay que mirar al futuro.
El pasado es como la moda, si no se usa más quedó out.
No lo entienden, nadie lo entiende, hay que soltar el pasado perchos. Es la única manera de ser feliz.
Les encanta hablar y hablar… se usa tanto el tiempo pasado y tan poco el tiempo presente, o futuro. Si miras para atrás lo único que haces es detenerte.
El que vive colgado del pasado se vuelve una persona resentida, rencorosa o melancólica lo cual es peor.
Yo trato y trato de soltar el pasado, pero parece que es el pasado el que no me suelta a mí.

nunca volveré a amar.

La garganta se me cierra, se me seca la boca, el estómago se me revuelve, quiero hablar pero no me salen las palabras. El mundo se me cayó a pedazos, todo perdió sentido, ya no sé que hacer, no sé que decir, no sé que sentir.
Me pasó de todo en la vida, sufrí mucho. Pero hasta hoy, creo que nunca había conocido el dolor.
Un dolor que no podía poner en palabras. Un perdón que no alcanzó, un dolor que siempre está ahí.
La medida del dolor es el amor, no hay dudas, mas amas, más grande es el dolor.
El dolor. Uno haría lo imposible por no sentir dolor.
No es el odio, no es la maldad, no es la injusticia lo que hace sufrir. Lo que duele es el amor.
El dolor, la maldad y la injusticia de los que amas, eso es lo que duele, pero duele con un dolor que mata.
No amar, no sentir, incluso odiar, es lo único que puede apagar este dolor.
necesito psicólogo ya.

Tratando de encontrar una salida a este laberinto se me ocurrió leer. Me dí cuenta, y me metí en el escritor.
Escribir te da la posibilidad de soñar nuevos mundos, otras realidades. El escritor trata de imitar la vida, pero la vida es el mejor de todos los escritores.
La vida va tramando las historias como quien hace una trenza cocida. La vida es un cuento que se escribe minuto a minuto, segundo a segundo. Buena escritora la vida, siembra historias que después cosechará, nada es azaroso.
Destinos cruzados, finales abiertos, todo está en la escritura, y está todo desde el principio. Pero escribir, además de contar, es soñar con algo diferente, es imaginar un mundo nuevo y tener fe en que será posible.
En la escritura no hay nada lineal, no existe el camino más corto, escribir es buscar rodeos para llegar a donde queres llegar.
Cuando desperté en este mundo no encontraba salida, me angustiaba, me deprimía, pero la vida me dio la escritura que es como este pico con el que boqueto y boqueo sin parar, buscando la salida, soñando que al final del camino será posible un nuevo mundo.
“Lo importante no es lo que nos pasa sino lo que hacemos con lo que nos pasa” decía siempre mi papá. Un día desperté en este mundo de mentira, en este horror hermoso y de plástico, desperté para ver que nos habían robado la identidad.
Para una boluda como yo despertar en este mundo trágico fue el golpe de horno que necesitaba, el caramelito que me faltaba en el frasco, la boluda tuvo que madurar, crecer, y estar a la altura de salvar el mundo, mi mundo, nuestro mundo.
A la fuerza tuve que aprender a ser creativa, a buscar nuevas soluciones a nuevos problemas. Tuve que aprender a ser escritora para poder escribir una nueva historia, y para eso hay que ser muy creativo.
Porque ahí está el secreto ¿no? Agarrar lo que nos pasó y hacer algo nuevo con eso, agarrar el mundo que nos tocó en suerte y escribir otro, un nuevo mundo.
Para poder crear un nuevo mundo primero tenes que decirle adiós al mundo en el que creías que vivías.
Podes decir lo que necesitas decir diciéndolo, o diciendo exactamente lo contrario. También podes decir algo con un gesto, con un guiño, el cuerpo te ayuda a decirlo.
A veces con el silencio decís todo. A veces una canción te ayuda a decir lo que necesitas decir. Otras veces hay que pegar un grito.
Pero cuando no decís lo que necesitas decir ni con palabras, ni gestos, ni con silencios, ni gritos, eso que necesitas decir se revela y habla como puede. Lo que necesitamos decir lo vamos a decir, como sea. Dicen que cuando uno no puede decir lo que necesita decir el cuerpo habla. Algunos tienen dolores de panza, de garganta o de cabeza, otros tienen alergia. Otros hablan con el lenguaje del cuerpo.
¿Pero ese idioma, el idioma del cuerpo, es tan fácil de entender? ¿Es un idioma universal?
A veces las palabras dicen una cosa y el cuerpo otra ¿A quién hay que creerle? ¿Pero cómo se interpreta ese lenguaje?
¿Un dolor de panza siempre significa miedo? ¿Un tic nervioso siempre significa nerviosismo? ¿Un dolor de garganta siempre indica que hay algo que se quiere decir y no se puede?
¿Un sueño se interpreta literalmente? ¿Un sueño quiere decir solamente lo que dice?
Se dice que alguien se mareó cuando llegó más alto de lo que puede manejar ¿Pero siempre un mareo significa eso?
Dicen que un dolor de cabeza puede ser por contractura o por pensamientos que dan vueltas y vueltas por tu cabeza ¿Siempre es así?
Una alergia es cuando el cuerpo se defiende exageradamente de agentes que interpreta como nocivos ¿Por qué tu cuerpo cree que debe defenderse? No creo que sea tan simple, yo creo que es tipo una clave. Hasta que no acertás exactamente la clave la puerta no se abre.
Cuando tenes una pesadilla podes decir “¿Habré comido pesado anoche?”, pero si te animás a ir más allá tal vez descubras el verdadero mensaje que ese sueño te trajo. El cuerpo tiene un lenguaje muy sutil.
Un dolor de panza no siempre es miedo, tal vez es solo un aviso que te recuerda cuáles son tus tiempos, tu estilo, tu manera.
Los dolores son alarmas que te da el cuerpo para avisarte que algo no anda bien, y el dolor no se va a ir hasta que descubras que es.
A veces un dolor te está diciendo que tenes que actuar, que algo tenes que hacer.

Así de simple, tu cuerpo seguirá hablando hasta que por fin escuches el mensaje.

sábado, 23 de octubre de 2010

Man, estoy en mi mejor momento, inmejorable. Un libro que está buenísimo, se llama “La Vida es Un Mercado”, lo escribió el señor Jay.
O sea nos da ese libro porque quiere que seamos unos tigres. El libro dice que hay que imaginarse la vida como un gran mercado en el que vos podés agarrar lo que quieras de la góndola. ¿Queres una casa? Vas a la góndola de las propiedades y agarras la que queres.
Pobre es el que quiere porque todo está ahí, en la góndola está todo lo que quieras.
¿Queres todo? Bueno, agarrate un changuito bien grande y mete todo lo que quieras, llévate el mercado entero, si para eso está.
Go and get it man, andá y conseguilo, así se vive ¿Queres algo? Anda a la góndola y agarralo.
Uno sabe que necesita para ser feliz. El ultimo celular, la última netbook, las zapatillas más caras, agarralo ahora, ya. Si es lo que necesitas para estar feliz, agarralo. ¿Vos sentís que esa persona es la que necesitas para ser feliz? Go and get it man.
Infeliz es el que quiere, porque lo que necesitas para ser feliz lo podes agarrar ¿Queres amor? Y bueno, andá a la góndola del amor.
Un gran mercado, eso es la vida. Este libro, este libro sí que la tiene clara. Porque es así, vos pedís y tenes lo que queres. Esa gilada de que el universo te da lo que pedís es posta.
El libro dice que el mundo se divide entre los que satisfacen sus deseos y los que intentan no desear.
El libro dice que los chicos, los orientales basaban su cultura en tratar de no desear como camino para ser feliz. En cambio acá no funcionamos como esos giles orientales y todo eso. Acá cuanto más deseas y más consumís lo que deseas más feliz sos, no?
The world is mine, unos pocos conocen el secreto, el secreto de que podes tener todo lo que queres, todo.
Eso de desear algo y no poder conseguirlo, eso es de giles, de loosers.
Todo, pero a ver, todo lo que deseas lo podes agarrar de la góndola. No digas que no.
Este libro la tiene tan clara, a ver, escuchen esto: ¿Se te murió el perro? Bueno, los perros no se lloran, se remplazan, anda a la góndola de los perros y conseguite otro, ya fue.
¿Queres un novio, una novia? Ok, andá a la góndola de los novios y agarrate uno.
Es así, vos hace tu pedido que en el mercado encontras todo, hasta el amor, no? No?

eso, es un discurso de ignorantes, un discurso de pendejo rico, un pensamiento de nene, de pendejo que se lleva el mundo por delante.

Entiendo a los malos, a los que hacen cosas horribles, los entiendo. Yo misma fui muy mala mucho tiempo. Yo creo que los malos son gente que simplemente no tuvo otra alternativa.
Yo mismo soy una mala que simplemente tuvo la chance de cambiar, y lo aproveché. Entiendo a los malos porque sé que simplemente buscan alguien a quien amar.
No me voy porque no me crean. No me voy porque mis amigos no me tomen enserio y no les importa lastimarme. Me voy porque necesito encontrar a alguien a quien amar.
También nuestro corazón es como un motorcito chiquitito que todo el tiempo busca y busca, busca encontrar a alguien a quien amar. No se cansa nunca, aunque estemos vencidos él siempre busca y busca, porque un corazón necesita amar.
A veces nos pasamos cincuenta cuadras, equivocamos el camino y el corazoncito sigue ahí, incansable, diciéndonos ‘no es por acá’, pero no lo escuchamos. Creemos que lo que el corazón busca es alguien que nos ame, pero no, el corazón no es tan egoísta, él solo busca alguien a quien amar.
Pero al final siempre el corazón se hace escuchar ¿Cómo ignorar esos latidos que son señales que nos indican el camino? Y yo, estoy escuchando mi corazón, me dice que lo que busco no está ahí, que no estuvo ni estará ahí. Un corazón necesita alguien que se deje amar porque esa es la busca más simple y más compleja de este viaje, alguien a quien amar.
Uno puede estar ciego gran parte del viaje, pero tarde o temprano empieza a ver el camino. Y yo estoy en eso, buscando ese lugar donde al fin esté mi roto para esta descocida.
Uno puede estar perdido, pero buscar el camino ya es parte de encontrarlo. Aunque te gane la desesperanza, aunque te gane el dolor, aunque creas que es demasiado tarde, busca en tu corazón, busca en tu alma mal herida. En algún lugar fuera de tu burbuja habrá alguien a quien amar.
Busca incansablemente, irremediablemente, porque para eso venimos a esta vida, para encontrar a alguien a quien amar.
¿Es un capricho?, ¿Es una necesidad?, ¿Es constancia?, ¿Es lealtad?, ¿Es tenacidad?, ¿Es terquedad?, ¿Es intransigencia?, ¿Es obstinación?.
¿Cómo se llama eso que sentimos, y no se va ni con el tiempo?, ¿Es amor?, ¿Es una manía?, ¿Es ceguera?, ¿Qué es? ....... ¿O es obseción?.
Es muy fácil confundir amor con obsesión, pero no son lo mismo. El amor está en todo el cuerpo, la obsesión solo está en tu cabeza. Te encierra en tu burbuja, te aísla, te adormece.
Cuando no hay amor aparece la obsesión, para aturdirnos, para hacernos creer que sentimos algo cuando en realidad no sentimos nada, porque estamos vacíos, vacíos de amor.
El amor saca lo mejor de uno, y la obsesión lo peor.
A veces podemos parecer valientes, arriesgados, y en realidad lo que nos empuja es estar ciegos, obsesionados.
Por la obsesión se puede hacer cualquier cosa, se puede lastimar tanto…
Porque la obsesión al fin y al cabo es un medio para llegar a ningún lado, o para llegar demasiado lejos.
Trampas en nuestra cabeza, y ahí vamos inocentes entregando nuestro cuerpo, creyendo que ese camino nos llevará hacia el amor justificando los medios por ese fin. Y en nombre del amor, matamos al amor.
Por eso las obsesiones son tan peligrosas, porque es un lugar del que nunca se vuelve.
De chica aprendí que para comunicarse no siempre son necesarias las palabras. Las palabras se pueden manipular, pueden perder su valor o tener demasiado. En cambio el silencio es más noble. El silencio es algo que se puede compartir. El silencio es estar en control. El silencio es poder.
Un día simplemente deje de hablar y descubrí que fue ahí cuando empezaron a escucharme mejor. Dicen que somos esclavos de nuestras palabras y dueños de nuestro silencio. Y yo nunca voy a ser esclava de nada.

Sufrir en silencio es un grito desesperado, un grito mudo que ensordece. El vacío se vuelve innombrable porque solo nombrar eso que nos falta nos parte el corazón al medio.
Es como eso que no queres contar para que no se pinche, crees que el solo hecho de nombrarlo puede arruinar todo. ¿Lo existe en silencio deja de existir si lo ponemos en palabras? Palabras obvias que no hace falta decir o tal vez justamente por obvias hay que decirlas. Lo viste mil veces, sabes que pasa, pero hasta no ponerle palabras no es real.




¿Los cuentos nos hacen dormir o nos despiertan? Todo depende de qué cuento nos contemos. Si te contas un cuento feliz tenes una historia feliz, si te contas un cuento triste tenes una historia triste.
Cuando te crees el cuento que te contaron es muy difícil imaginar otro cuento ¿no? Uno se cree la historia que más le conviene.
Uno elige que cuento creer, pero no elige quién nos cuenta cada cuento. Lo triste es darse cuenta que el cuento que más te gusta es solo eso, un cuento. En Hansel y Gretel el padre de ellos ¿Es bueno? ¿Es malo? Depende de quien lo lea.
Los cuentos para dormir son lindos, son como una caricia que llenan de lindos sueños. Pero cuando esos cuentos te mienten y te cuentan una historia que no es, no son lindos, no son una caricia, son cuentos para no despertar.
Elegir entre un caoba claro y un caoba oscuro es un dilema, pero dilema dilema es cuando tenes que elegir entre ser el malo de la película para hacer un bien o el bueno y hacer un mal.
Ver el amor, la ilusión, ver esa felicidad y saber que es una felicidad artificial, pero si ellos no lo saben, si ellos son felices sin saber la verdad ¿Qué se debe hacer? ¿Intervenir o dejar hacer? ¿Qué?
¿Rubor o esa base pálida? Es un dilema, pero el dilemon es cuando tenes tan buenas razones para hacer algo como para no hacerlo.
Cuando tenes un dilema ya no se trata de que queres elegir sino de que preferís perder.
Una elección es decidir entre dos cosas buenas, pero un dilema es elegir entre dos malas.
¿Qué perder? De eso se trata un dilema. Definir cuál es la pérdida más soportable.
Sabes que sos el malo de la película pero sabes también que tenes tus razones. Sabes que está tan mal hacerlo y tan mal no hacerlo.
Ser o no la mala de la novela ha sido mi dilema. Puede que sea un dilema menor al lado de otros pero tengo que elegir entre partirle el corazón a una amiga para que no viva una mentira o dejarla vivir en su falsa felicidad.
Si un dilema es elegir entre dos males yo elijo el que puedo, el más bólido tal vez, elijo el mal del no hay tal crisis.
Usar tacos si o si aunque me reviente los pies eso es un dilema, pero tenes que hacer lo contrario a lo que sentís… matate con ese dilema.
Nunca es claro quién es el malo de la película. Incluso el malo de la película tiene su propio dilema, hace lo que hace porque tiene que elegir entre dos males.
Elegir que perder, de eso se tratan todos los dilemas.